Ingeniero Ambiental de la Universidad Católica de Temuco (UCT) y Diplomado en Inteligencia Competitiva Regional y Gestión de la Innovación. Encargado Operativo del Laboratorio de Emisiones Gaseosas de la Escuela de Ingeniería Ambiental e Ingeniero de Proyectos de la Unidad de Calidad del Aire de la UC Temuco. Miembro fundador del Grupo de Alto Rendimiento de la Facultad de Ingeniería. Haciendo cosas nuevas en búsqueda de una mejor calidad de vida.
sábado, 19 de mayo de 2007
La Velocidad
Sin duda la noticia del tipo viajando a 280 km/hr. en la costanera de Santiago fué motivo de comentarios durante esta semana. Y como no, si esa velocidad no es, o no debiera ser practicable en ninguna parte que no sea una pista de automovilismo de Formula 1.
Pero al parecer esto no es tan alejado de lo que ocurre en realidad en muchos lugares de nuestro país de manera clandestina. De todas formas creo que para hacer lo hizo ese tipo no hay que tener simplemente un auto, hay que tener una máquina.
Por último no tengo claro que medidas se podrían adoptar para evitar este tipo de situaciones.
Me pregunto que pasaría si las autoridades exigieran a los fabricantes de autos algún tipo de control o de apagado automático, que se yo, para cuando se exeda un umbral de velocidad, que pudiese ser el de velocidad máxima en Chile o para no ser tan estrictos, permitir hasta unos 150 - 160 km/hr. Porque en definitiva, que ganas con tener un auto que corra 300 km/hr si está prohibido pasar de 120 km/hr
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1 comentario:
lo que creo que no serviria mucho ya que los mismos mecanicos modifican los autos para que corran a grandes velocidades ya que hay varios sistemas que hacen que el auto practicamente vuele, no se si sera real pero la inyeccion de oxido nitroso hace que los autos corran a velocidades mas altas que las que mencionas...
Saludos
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